El empleo de proteínas y péptidos antimicrobianos se presenta como una alternativa prometedora a los antibióticos tradicionales, que enfrentan crecientes desafíos por la resistencia de los patógenos. En las últimas décadas, se ha documentado que las bacterias ácido lácticas (BAL) sintetizan compuestos proteicos con propiedades antimicrobianas, como bacteriocinas, peptidoglucano hidrolasas...